BUSCANDO ARTE
Buscando un nuevo tema para escribir la entrada de hoy, he encontrado por casualidad, objetos cotidianos convertidos en obras de arte, ya que han sido hechos en tamaño gigante.
Se trata de obras realizadas en un pueblo pequeño de menos de 3000 habitantes, llamado Casey en Illinois.
Ocho de estas obras se han incluido en el libro Guinness de los Records.
Esta historia empezó en 2012 cuando James D. Bolin construyó el carrillón de viento más grande del mundo, de 17 metros de altura.
En el libro Guinness también están una silla mecedora de 17,09 m de alto y 9,99 de ancho, unas agujas de tejer de 3,98 m de largo y 8,25 cm de diámetro, un ganchillo de crochet de 1,87 m de largo y 7,6 cm de diámetro, un buzón para correos de 162,63 m cúbicos, unos zuecos de madera de 1,48 m de alto, 3,5 m de largo y 1,77 m de ancho, un soporte de pelotas de golf de 9,37 m de altura y una horquilla de granja de 18,64 m de largo y 2,56 de ancho.
Tiene también otros objetos que no están incluidos en el libro de los records, pero son igual de espectaculares como una mazorca de maíz, un cactus, una jaula de pájaros, una vara de medir y una moneda.
Seria impresionante poder pasear entre estos objetos sintiéndose tan pequeñ@.
Seguro que ha atraído a muchos visitantes y seguro que la economía de la ciudad ha mejorado.
La mente humana no le pone limite a la imaginación.
Comentarios
Publicar un comentario